¿Por qué no llego a fin de mes?

“Piensa en lo que que haces cuando te endeudas; le otorgas a otro el poder sobre tu libertad”. (Franklin)

 

Voy a empezar a escribir en este blog unos artículos de finanzas personales, porque he descubierto que con esto podemos ayudar a que muchas personas puedan vivir mejor su vida como profesionales y directivos.

 

Primero lo primero

El mayor objetivo de una vida equilibrada, desde el punto de vista económico, es tener un flujo de caja positivo, lo cual significa que tengamos más entradas que salidas de dinero. Cuando es negativo, o sea, más salidas que entradas vienen los problemas, las crisis personales, la angustia. Una de las maneras de saber si nuestro flujo de caja es positivo o negativo es tu respuesta a la pregunta: ¿Llegas a fin de mes?

¿Por qué no llegas a fin de mes?

Hay tres razones fundamentales para responder a esta pregunta:

1. Vivimos muy por encima de nuestras posibilidades y, como consecuencia, nuestras malas decisiones sobre el carro, la casa, la ropa, la tarjeta de crédito o los viajes nos convierten en siervos de un amo muy poderoso: las deudas

2. Nos endeudamos para financiar nuestro estilo de vida y, a medida que, nos endeudamos más, pues, más hondo estamos cavando el hueco sin poder salir

3. No tenemos una estrategia de ingresos superior a nuestros gastos. La decisión que tomamos es trabajar más duro para pagar pero descuidamos otras dimensiones de la vida: cónyuges, hijos, amigos, salud, etc.

 

¿Qué hacer?

Lo primero es tomar conciencia. Esto significa desarrollar un pensamiento profundo de reconocer que este problema está generando unas consecuencias que no quieres tener. Luego, todos los días repetirte “sólo por hoy” no me endeudaré más, no compraré nada que no esté dentro de mis posibilidades y, sobre todo, no seré esclavo de mis deseos.

Lo segundo es tomar la decisión difícil y dolorosa de pagar todas tus deudas para cumplir tu objetivo de tener un flujo de caja positivo. Esto implica parar de endeudarte y bajar el consumo y los pequeños excedentes llevarlos a un fondo que luego será para pagar una deuda (una por una).

Te propongo un plan de acción

1. Escoge tu enemigo: debes elegir una primera deuda como objetivo y empeñarte en pagarla hasta lograrlo
2. Inicia un pequeño ahorro destinado a liquidarlo para pagar tu deuda principal. Esto implica disminuir tus gastos basados en deseos e impulsos

3. Enfócate en crear valor: debes descubrir la manera cómo contribuyes al mundo y cómo el mundo te lo reconoce económicamente, por tanto, márcate unos objetivos de crear un mayor valor que te permitan tener más recursos para financiar una vida más tranquila

 

Conclusión

Probablemente si escogiste leer este artículo es porque tus problemas con tus finanzas personales te están quitando la paz. Los riesgos de nuestra salud mental, la intranquilidad y la sensación de tener nuestro presente y futuro desequilibrado nos piden que actuemos. Por eso, el centro de una vida mejor es quitarnos las cadenas de las deudas que nos impiden ir más rápido por el camino de la vida. Vivir endeudado es como correr con piedras en los zapatos.

La mayor riqueza de la vida es la libertad.